No hay que pensar que solo los grandes cristales de cuarzo crean campos de energía; también cristales como las ágatas y los berilos a veces son superiores en curaciones debido a que se les suma la vibración de sus colores.

Todos los cristales crean campos de fuerza, longitud de ondas y el sistema endocrino es el receptor de estas vibraciones.
 
 

A partir de aquí comienza la “armonización” del cuerpo o del órgano afectado. Hay que tener presente que la curación a través de los cristales (Gemoterapia) es lenta.

Los cristales también pueden ser utilizados como catalizadores, siendo estos una fuente de energías positivas, permiten el intercambio energético con el ser humano al absorber las energías negativas, transmutarlas y retransmitirlas nuevamente en energía positiva; pudiendo esta misma purificar, direccionar, tonificar y transmutar la propia energía vital.

Los cristales no poseen poderes mágicos, solo pueden reforzar nuestra propia capacidad interaccionándola con su energía.

El campo energético de un cristal de cuarzo tiene capacidad de emisión. Cualquiera de nosotros que entre en contacto con un cristal de cuarzo recibe, por el solo hecho de tocarlo una carga eléctrica. De esta manera, con el uso continuo del cristal, obtendremos una saturación energética que, acumulada con la propia energía orgánica, se convertirá en un "escudo energético" ampliando así nuestro campo bioplasmático (energía propia del ser humano que lo recubre en toda su extensión).

La intensidad puede ser mucho mayor y es proporcional al periodo de uso de un cristal, que puede tener efectos energéticos, curativos, amplificadores de la energía mental, etc


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amatista

El cristal para el espíritu

Se puede decir que para el trabajo espiritual la amatista es absolutamente imprescindible. Y es que resulta ser la piedra del tercer ojo por excelencia, de modo que trabajar con ella nos permite abrirlo y limpiarlo y dejar aflorar así todo lo que llevamos dentro.

Como piedra clarificadora que es, en el campo espiritual nos puede guiar hacia nuestro verdadero Yo. Nos permite así un mayor conocimiento de nosotros mismos y de nuestra misión en la vida ayudándonos a discernir entre lo verdaderamente importante y lo no tan importante para nosotros.

Es una de las piedras del primer chakra y del sexto chakra de modo que es fabulosa para activar la energía de estos importantes centros de poder.

Sus mensajes son una fuente de energía y actividad. Da explicaciones puntuales sobre el estado de ánimo, al tiempo que indica cambios en la vivienda, en el trabajo, de auto, de situación personal.